1 de cada 10 niñas, niños y adolescentes en el mundo trabajan, y cerca la mitad de ellos realizan trabajos peligrosos que podrían causarles daños físicos y emocionales. Los avances en la eliminación del trabajo infantil han retrocedido en el contexto de la pandemia de la COVID-19.
Una parte fundamental de nuestro trabajo en México, son las acciones dirigidas a la prevención y erradicación del trabajo infantil, en diversas áreas económicas como la agricultura, la minería, la indumentaria; en los sectores de la industria de transformación y en servicios también.
Desde hace más de 15 años, en México hemos desarrollado iniciativas innovadoras para garantizar los derechos humanos, que nos han permitido trabajar con empresas líderes, marcas globales y sus cadenas de suministro, alcanzando a sus directivos y por supuesto también los trabajadores que forman parte de estas empresas.
Sabemos que el mundo ha avanzado en el cumplimiento de los derechos humanos, y México no ha sido la excepción en esta corriente global que coloca en el centro a las personas es parte también de todos los procesos legislativos que México ha ido armonizando el marco legal nacional, con normas y estándares internacionales.
Desde 2015, México estableció cambios sin precedentes en la vida laboral, en particular, en relación con el trabajo infantil, que, si bien una parte está vinculado a la economía informal, otra parte sustantiva está relacionada con las cadenas de suministro. La información oficial sobre trabajo infantil indica que, en México, 1.4 millones de niñas, niños y adolescentes trabajan en empresas formales o cadenas de suministro. La mayoría en los sectores agropecuarios, servicios y comercio.

Actualmente, la economía global, las directrices de sostenibilidad, el escrutinio público y los consumidores, demandan que las empresas vayan más allá de su propósito y establezcan -sin duda- políticas orientadas al cumplimiento de principios de derechos humanos, y que éstas se materialicen en acciones tangibles, que orienten la gestión del negocio y la relación con sus partes interesadas.
El tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá ha captado el interés de las empresas en relación con los derechos laborales; cuyo cumplimiento es una exigencia impostergable.
Ante este panorama, para las empresas será indispensable garantizar, respetar y cumplir los derechos de infancia y humanos en el lugar de trabajo como parte de su estrategia de sostenibilidad.
Hoy, las empresas reconocen la necesidad de contar con apoyo profesional y de servicios especializados para evaluar sus riesgos, diseñar estrategias e implementar acciones, que les aseguren el cumplimiento de los derechos humanos en el lugar de trabajo y especialmente los relacionados con trabajo infantil, trabajo forzoso y condiciones seguras de trabajo, de una manera sostenible y efectiva.
En 2019 nos propusimos crear un área específica para brindar estos servicios a las empresas de México y Latinoamérica, identificamos la experiencia de Save the Children Suecia que creó THE CENTRE en Hong Kong, una organización de derechos de infancia orientada al sector empresarial; y así se dieron los primeros pasos para dar vida a esta nueva organización que suma la experiencia en Asia, más nuestra propia experiencia de trabajo en México con el sector empresarial.
Hasta ahora, en México y Latinoamérica no existía una organización con una visión integral capaz de entender e interpretar el entorno local y global, y de generar soluciones adaptadas a las necesidades de las empresas y que además aporten valor económico y social.
Por ello, hoy les presentamos EL CENTRO de derechos de la niñez y empresas, que acompañará al sector privado para responder efectivamente a las exigencias del contexto actual, con el diseño e implementación de soluciones específicas, que les aseguren operaciones y cadenas de suministro sólidas, éticas y sustentables.
EL CENTRO de derechos de la niñez y empresas tiene como propósito mejorar la capacidad de las empresas en México y Latinoamérica para prevenir y erradicar el trabajo infantil, y asegurar el cumplimiento de derechos humanos laborales en sus operaciones y en su cadena de suministro.
Conocemos los retos que las empresas enfrentan hoy en día, podemos responder de manera oportuna, tenemos experiencia y conocimientos sobre cómo trabajar con las empresas para abordar las cuestiones relacionadas con el trabajo infantil y los derechos laborales, desde la prevención hasta su remediación. Nuestra promesa de valor para las empresas interesadas en los servicios que ofrece EL CENTRO es que asegurarán el cumplimiento de sus responsabilidades legales y comerciales, relacionadas con trabajo infantil y otros derechos humanos en el lugar de trabajo, y gestionarán adecuadamente sus riesgos, tendrán una fuerza de trabajo más comprometida y estable; y el aseguramiento de su reputación corporativa.
¿Por qué las empresas deberían preocuparse por los derechos de la niñez?
Las niñas, niños y adolescentes se ven afectados de una forma u otra por la actividad empresarial como:
Consumidores de productos y servicios.
Jóvenes trabajadores.
Niños y niñas en situación de trabajo infantil.
Hijas e hijos de trabajadores.
Usuarios de plataformas digitales.
Habitantes de las áreas donde se ubican las empresas.

Beneficios para las empresas.
- Contar con acceso a financiamientos.
- Construir una marca corporativa más fuerte.
- Minimizar riesgos sociales en sus operaciones.
- Cumplir con criterios ASG y de Responsabilidad Social.
- Fortalecer su cadena de suministro.
- Alinear sus procesos a requerimientos internacionales.
Riesgos y tendencias
Las últimas estimaciones mundiales indican que el número de niños y niñas en situación de trabajo infantil ha aumentado a 160 millones en todo el mundo, un aumento de 8,4 millones de niños en los últimos cuatro años.
- 8.2 millones de niños y niñas entre 5 y 17 años trabajan en América Latina y el Caribe.
- La mayoría de estos niños y niñas son adolescente 67% niños y 33% niñas.
- El trabajo infantil está presente tanto en áreas rurales como urbanas, y el 48,7% se encuentra en la agricultura.
- Más del 50% de los niños y niñas realizan trabajos peligrosos.
